CARICIAS AL ALMA

Las historias que se esconden

tras mi trémula mirada

son los sueños que se sueñan

y suspiros que se escapan.

Son heridas infringidas,

son lágrimas que resbalan,

son temblores que estremecen

y sonrisas que contagian.

Son redoblar de tambores,

son esas reglas marcadas,

son cada meta cumplida

y cada espina arrancada.

Son el dolor en el aire,

son fantasías truncadas,

son soledades perdidas

y las risas enmarcadas.

Son caer y levantarse,

son las rodillas hincadas,

son el amor al acecho

y caricias en el alma.

ACÚNAME

Acúname en tu sonrisa

y te regalo mi vida

para vivirla contigo

hasta el final de los días.

Entrégame sólo un sueño

para contigo soñarlo

en las noches estrelladas,

y podamos alcanzarlo.

Recórreme con tus labios

despacio y muy suavemente,

transportándome a otros mundos,

haciendo volar mi mente.

Envuélveme con tus besos

y te regalo los míos

para viajar a ese mundo

donde podamos vivirlo.

Acúname en tu sonrisa,

entrégame sólo un sueño,

recórreme con tus labios

y envuélveme con tus besos.

SÓLO TÚ

Puedo perderme en tus ojos,

en tu profunda mirada,

en el fondo de ese iris

que cálida sangre emana.

Llegaré a conocer

los secretos de tu boca,

a apagar los dulces labios

de un suave color rosa.

La expresión imperturbable

de ese rostro tan sereno,

que a través de cada poro

emana un frío veneno,

hace transformarse al mundo

que de cerca me rodea,

haciéndose interminable

cada segundo de espera.

Deseo abrazarte fuerte

y tenerte entre mis brazos,

parándose los relojes

que al tiempo hacen daño;

no pasarán los segundos

que estropeen el recuerdo:

frenaré este viejo mundo,

guardaré todo este tiempo.

Sobre la blanca repisa

el calendario espera,

espera a pasar las hojas,

y que el tiempo ya no vuelva.

Y yo espero tus ojos

para que al fin me despierten

de este sueño intranquilo,

para mirarte por siempre.